On the road again

Hacía mucho que no me calzaba estas zapatillas para salir a correr. Después de unos días de descanso, con trancazo y en los que me he dedicado a dormir como un ceporro y a comer, el sábado salí a correr. Después de 22', alarma desde el cuadriceps de la pierna derecha. Paro por prudencia y acabo andando. Esto mas dos grandes ampollas, me hacen pensar que esto de correr es muy malo.

Pero hay que correr. Desde hace mucho está programado correr el Cto. de España de Triatlon en Úbeda y va a haber que cascarse diez kilómetros. No tengo ninguna pretensión ya que lo único que he entrenado es la bici, pero sólo el hecho de correr un olímpico ya merece la pena. Para ver qué tal voy, si van bien las cosas, correré la semana anterior el de Oliva, que retoma el circuito de bici clásico y no la pachangada del año pasado.

Hoy he vuelto a correr. Esta vez, media horita. Probablemente la buena compañía ha hecho que me resulte una media hora muy placentera, esta vez sin molestias, ni siquiera la pestosa lesión de la cadera que me trae por la calle de la amargura desde el pasado Octubre. Ya va a hacer casi un año. Tengo que tener cuidado e intentar no correr dos días seguidos y parar a la más mínima señal de alarma.

En fín, que este mesecito también va a tener su gracia. En principio, si todo va bien, dos triatlones y una marcha de carretera con el tándem, aunque para hacerla, primero tenemos que irnos un día Nuria y yo a subir algún puerto porque por ahí dicen que una marcha con dos puertos va a ser mucha tela para nosotras ¿?